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Mostrando las entradas con la etiqueta desinformación

Día 12 – Bitácora final: la república imaginada, la escucha conquistada

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  Hay finales que no cierran, solo se disuelven lentamente en la conciencia. Este es uno de ellos. Última mañana en Gummersbach. La sala está en silencio, pero aún flota en el aire el eco de tantas lenguas, ideas, desacuerdos, chistes, traducciones, silencios. Las sillas vacías no son sólo muebles: son memorias en pausa. La cartulina del ejercicio colectivo —la que dibujaba una “República de la Prensa”— quedó recostada en un rincón, como un manifiesto modesto y sin firma. Y sin embargo, ahí está: aún más real que muchas constituciones. Este seminario no fue solo un programa. Fue una pausa lúcida. Una república momentánea. Una escucha conquistada. Aquí aprendimos que la libertad de expresión no es un derecho abstracto ni una batalla ganada. Es una tarea cotidiana, plural, desgastante, reparadora. No se ejerce solo desde las redacciones o los micrófonos, sino también desde las preguntas que uno se hace, las dudas que se permite, el silencio que cede al otro. En medio de la avalanch...

Día 9 Berlín — Desinformación: el pop más exitoso de nuestro tiempo

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El instante Una pantalla blanca. Letras grandes: “The Digital Epistemic Divide” . Suena a título de disco conceptual. Algo entre Pink Floyd y Laurie Anderson. Pero no: es el nombre técnico de un fenómeno que ya se nos metió en el cuerpo, como ese jingle que odias pero igual tarareas. Estamos en Berlín, ciudad donde las palabras aún importan, pero donde también aprendimos —de la forma más brutal— que las palabras pueden matar. La jornada de hoy en la Akademie no se parece a una clase ni a un taller. Se parece más a una retrospectiva en el MoMA: “ La desinformación como arte pop del siglo XXI ”. En las paredes invisibles de esta galería mental desfilan memes, capturas de WhatsApp, cuentas fantasmas, influencers enmascarados de activismo y tías entrañables que reenvían fake news como si fueran recetas de cocina. El pensamiento La desinformación no se construye como un discurso: se diseña como un producto cultural. Como una canción de reguetón: repetitiva, pegajosa, predecible, pero efi...

Día 7 - Sin tabúes y sin bozal: por qué la prensa libre y plural todavía importa (y mucho)

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  “We allow no taboos against and seize every chance for the spread of knowledge.” —Timothy Garton Ash (sí, el tipo que habría sido un gran invitado de tertulia en Segundas Temporadas Podcast ) Prólogo con vinilo raspado Si uno se asoma a mis estanterías de acetatos —esas joyas tercas que aún giran a 33 RPM en pleno 2025— descubrirá que incluso los discos más rayados conservan un encanto insobornable: la aguja salta, sí, pero la melodía reaparece con una especie de tozudez romántica. Algo parecido ocurre con la conversación pública. Viene golpeada por propaganda, troles y desinformación barata, pero sigue sonando; y cuando la silenciamos perdemos, como con un disco roto, la magia de toda la pista . Un manual de caudillo que siempre arranca insultando al mensajero Todo autócrata wannabe se presenta con tres golpes muy ensayados. Primero se despacha contra la “prensa corrupta” o el “periodismo vendido”, un derechazo a la mandíbula del mensajero que le permite monopolizar el micrófono...